domingo, 1 de mayo de 2011

Un 1º de mayo gris y tristón.

Fotografía: Benjamín Menéndez (Terry)

Un 1º de mayo en Oviedo gris, algo tristón y pasado por agua. Eché en falta, además de una mayor asistencia, el canto de la Internacional para cerrar  el acto. Las señas de identidad son importantes siempre. No son buenos tiempos estos que nos han tocado a los trabajadores,  ni lo son para la izquierda de este país. No deberíamos olvidar que la movilización y la firmeza en la defensa del estado de bienestar, de lo público, es nuestra mejor apuesta. Lo que costó muchos años conseguir no podemos permitir que nos lo arrebaten.

1 comentario:

Valle del Candín "Terry" dijo...

Los primeros de Mayo son la identidad de todo un movimiento obrero. En los tiempos que transcurren el una parte del proletariado da la espalda e ignora sus principios y como dice el refran. "Quien pierde su origen pierde su identidad". Me gustaría equivocarme que en un futuro no muy lejano, cada uno se situe en su lugar y volvamos a ser esa fuerza proletaria que en una misma dirección camine.Salud y viva el PRIMERO DE MAYO.
B.M.M.